El amor de Dios es siempre fiel, perdonador, generoso, siempre honesto, profundo, verdadero, inmenso. Es el único amor que nunca nos abandona. Como suele decir el pastor Rick Warren, autor del libro Una vida con propósito, Dios no podría amarte más aunque fueras una mejor persona y no podría amarte menos aunque fueras una peor persona. Él sólo sabe amarte porque Dios es amor.

Mateo 7:11  Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan? 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Eventos: Encuentro para Mujeres y Taller sobre emociones

Prensa misionera mundial: Material evangelístico y de discipulado